La cirugía de reducción de abdomen o abdominoplastia, es realizada en uno de los quirófanos de Clínica Robles, totalmente equipados y habilitados para dicha práctica.

El paciente es admitido a media mañana, y mediante una suave sedación intravenosa y anestesia local se lo mantiene relajado durante la operación.

Las incisiones serán practicadas en el nivel de la zona púbica. De esta manera, se disimularán las cicatrices entre los pliegues naturales de la piel. Este procedimiento quirúrgico, permitirá la extracción del excedente de tejido graso y piel, a la vez que tensará el área abdominal.

Una vez finalizada la cirugía de reducción de abdomen o abdominoplastia, el paciente es llevado a la sala de recuperación, y mediante medicación se tratan las molestias normales que puedan surgir. En la zona tratada, se colocarán vendajes de compresión, y hielo permanente, con el fin de que su cuerpo se adecue a la nueva forma adquirida.

Luego de la Dermolipectomia de Abdomen. Una vez finalizada la cirugía de abdomen o abdominoplastia, deberá asistir a controles médicos y mantener el área tratada con los vendajes colocados y hielo permanente. Si bien las posibles molestias son amenguadas con medicación pertinente, sus esfuerzos y labores de la vida cotidiana se verán restringidos por unos días. Será fundamental, que, durante la primera semana, sus actividades sean moderadas y cumpla con todas aquellas indicaciones que el Dr. Robles hubiera provisto.

Transcurrida una semana, se podrán extraer algunos puntos. Y pasados los 15 días, podrá retomar su vida diaria, siempre que los esfuerzos vigorosos sean evitados.

Se debe tener en cuenta, que el área tratada tiene que estar resguardada de los efectos del sol, y en el caso de exposición, aplicar protector solar de manera permanente.

Las líneas de incisión se irán atenuando con el correr del tiempo. El Dr. Robles, procurará practicarlas en los pliegues naturales de la piel, con el objetivo de que puedan disimularse con el uso de trajes de baño o prendas de uso habitual.